Sevilla, 30 abr (EFE).- El extremo derecho del Real Betis Joaquín Sánchez dijo que está “triste por no haberle dado una alegría a la afición” en el encuentro que su equipo perdió esta noche (0-2) frente al Barcelona en el Benito Villamarín.
Joaquín admitió que “era un partido muy difícil” en el que el Betis comenzó “defendiendo bien, cerradito, controlando sin problemas hasta la expulsión de Westermann” en el minuto 35, motivada por lo que él considera como una “primera cartulina muy rigurosa”.
El jugador portuense entiende que con once hombres su equipo podría “haber tenido alguna opción, pero el Barça tiene mucha pegada”, de modo que ahora ya sólo piensa en “terminar lo mejor posible e ir a Eibar con buenas sensaciones”.
Por su parte, el capitán del Real Betis, Antonio Adán, ha considerado hoy que el partido perdido por su equipo esta noche (0-2) frente al Barcelona “lo cambia quedarse con diez futbolistas” porque “hasta entonces”, su equipo “estaba defendiendo sin apuros”.
Adán recordó que “si estos partidos son difíciles con once, con diez lo son muchísimo más” y lamentó el “malentendido” con su compañero, el central argentino Germán Pezzella, en la acción del primer gol del equipo catalán.
“Ha sido una jugada que ellos hacen mucho con entrada de jugadores de la segunda línea. Le doy una voz a Pezzella, pero entiendo que su inercia es sacar el balón como sea. No es cuestión de echarle la culpa a nadie, todos tenemos parte de responsabilidad”, explicó.
El portero madrileño insistió en su deseo de que el Barcelona no gane la Liga porque su “primer objetivo siempre es sumar puntos para el Betis” y “si esos triunfos sirven para ayudar al Real Madrid, mucho mejor”.
Aunque la permanencia está garantizada para el Betis, Adán desea “ganar los dos partidos que quedan para quedar lo más arriba posible, ya que para el club es importante desde el punto de vista económico”.
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